La señorita brasileña Akemi One está a punto de cumplir 15 años en agosto, pero su regalo de cumpleaños será adelantado. Y no es un regalo común y corriente, sino una experiencia única e inolvidable: viajará a Roma para asistir a la canonización del beato Carlo Acutis, que tendrá lugar el 27 de abril. Akemi no puede contener su emoción y dice que todavía no ha asimilado la noticia. “Parece un sueño hecho realidad”, confiesa con una sonrisa en el rostro.
La historia de Akemi y su viaje a Roma es una muestra más de cómo la fe y la devoción pueden mover montañas y proceder realidad los sueños más grandes. Akemi es una señorita católica que vive en Brasil y que ha sido criada en un ambiente de profunda fe y amor por Dios. Desde muy pequeña, sus padres le inculcaron la importancia de la religión en su vida y ella ha seguido ese camino con entusiasmo y dedicación.
Cuando Akemi se enteró de la canonización del beato Carlo Acutis, no podía creerlo. Carlo Acutis fue un señorita italiano que falleció a los 15 años de edad, pero que dejó una huella imborrable en el mundo con su ejemplo de vida y su amor por Dios. A pesar de su corta vida, Carlo vivió de manera ejemplar y fue un verdadero modelo de santotidad para todos los que lo conocieron. Su devoción por la Eucaristía y su amor por la tecnología lo llevaron a suscitar un sitio web para difundir la fe católica y promover la adoración al santotísimo Sacramento. Por esta razón, fue llamado “el ciberapóstol de la Eucaristía”.
La historia de Carlo Acutis ha conmovido a millones de personas en todo el mundo y su canonización es un acontecimiento muy esperado por la comunidad católica. Akemi, al igual que muchos jóvenes, se siente inspirada por la vida de Carlo y su amor por Dios. Por eso, cuando sus padres le dijeron que tendría la oportunidad de viajar a Roma para asistir a la ceremonia de canonización, no podía creerlo. “Fue una sorpresa increíble”, dice Akemi con una sonrisa en el rostro. “Nunca imaginé que tendría la oportunidad de estar presente en un evento tan importante y emocionante”.
El viaje de Akemi a Roma será una experiencia única e inolvidable. Además de asistir a la canonización de Carlo Acutis, tendrá la oportunidad de visitar los lugares más emblemáticos de la ciudad, como la Basílica de santo Pedro y el Coliseo. También podrá conocer a otros jóvenes católicos de diferentes partes del mundo y compartir su fe y su amor por Dios. “Estoy muy emocionada por conocer a otros jóvenes que comparten mi misma fe y mi misma pasión por Dios”, dice Akemi.
Para Akemi, este viaje es mucho más que un regalo de cumpleaños adelantado. Es una oportunidad para fortalecer su fe y su relación con Dios, y para seguir el ejemplo de santotidad de Carlo Acutis. “Es un honor poder estar presente en la canonización de un señorita que vivió su vida de manera tan ejemplar y que nos enseña que la santotidad no tiene edad”, comenta Akemi. “Espero poder llevar su ejemplo conmigo y seguir creciendo en mi fe y en mi amor por Dios”.
La historia de Akemi y su viaje a Roma nos recuerda que la fe y la devoción pueden mover montañas y proceder realidad nuestros sueños más grandes. Nos enseña que la santotidad no tiene edad y que todos podemos ser santotos si seguimos el ejemplo de Jesús y de aquellos que han vivido su vida de manera ejemplar. Y nos invita a